Senegal es sin duda un destino ideal para quienes desean adentrarse en el Africa negra, Es un destino exótico, un país de colores, de sonidos y de espectaculares imágenes. 

Senegal acoge algunas de las playas más fotografiadas del mundo, y su costa de arrecifes y cayos son un paraíso para los amantes del buceo y la vida submarina. 

Dakar es una ciudad enorme, frenética y rebosante de vida, en donde puedes encontrar una combinación de todos los paisajes, aromas y sonidos de Africa: mercados, música en directo, puestos de comida callejera, y una animada vida nocturna. Entre sus habitantes destacan representantes de la más alta sociadad, militares franceses pero también expatriados. 

Senegal es un país con seis parques naturales, lo que ofrece una gran oportunidad para practicar la observación de aves , el ecoturismo, la pesca  y la caza deportiva.

Fuera de la agitada Dakar, se puede realizar un viaje por la naturaleza por los deltas de los ríos Casamance y Saloum, un recorrido en piragua entre manglares espesos, arroyos, lagunas pequeñas. 

A tan sólo media hora de la capital encontramos uno de los fenómenos naturales más curiosos: el Lago Rosa, un lago muy grande y poco profundo, de aguas calidas y con un alto nivel de salinidad caliente, grande pero poco profunda, con un alto nivel de sal que hace posible que caso todo flote en él

Uno de los principales atractivos es la Isla de Gorée, un antigua base de la trata de esclavos del Africa Occidental, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Su principal atractivo es la Maison des Esclaves y sus "puertas sin retorno".. 

En el país no hay que dejar de hacer una visita a Saint Louis, antigua capital del Africa Occidental en tiempos de la colonización francesa, e igual Gorée, fué declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Si se quieren conocer a las tribus ancestrales, no olvidéis incluir una visita al Pais Bassari, donde aún existen poblados animistas al igual que la Casamance.  

Lo que no te debes perder 

• Perderte por los mercados de Dakar

• Déjate flotar en el Lago Rosa.

• Un universo de manglares: el Delta del Saloum.  

• Una visita impactante e inolvidable: Isla de Gorée